Regenerar: cuando sembrar es sanar
Aragón y Costa Rica ensayan una agricultura que repara la tierra y el tejido rural.
04/09/2025
Marco Tulio Vega

En medio de paisajes marcados por la sequía y la erosión, dos territorios distantes —Monegros en Aragón y Guanacaste en Costa Rica— convergen en una misma apuesta: cultivar sin dañar, producir sanando.
En Monegros, el Gobierno de Aragón impulsa un plan piloto de agricultura regenerativa en fincas de secano. La iniciativa incluye formación técnica, incentivos para prácticas como la rotación de cultivos y el uso de cubiertas vegetales, y alianzas con universidades para monitorear la salud del suelo. Más allá de la productividad, el proyecto busca devolverle vitalidad al suelo y resiliencia a las comunidades rurales.
“No se trata solo de sembrar, sino de sanar lo que hemos desgastado”, expresó Pilar Lafuente, directora de Innovación Rural.
Mientras tanto, en Nicoya, Guanacaste, la cooperativa COOPEREGENERATIVA R.L. lidera un modelo similar, con apoyo del programa Costa Rica Regenerativa y el Instituto de Fomento Cooperativo (INFOCOOP). Agricultores reciben capacitación gratuita, acceso a comercialización digital y certificaciones de cultivos regenerativos. El enfoque incluye también ganadería sostenible, cosecha de agua y planificación agroecológica por temporada.
Ambos territorios, aunque separados por océanos, comparten desafíos comunes: degradación del suelo, cambio climático y migración rural. Pero también comparten respuestas: regenerar desde lo local, con saberes propios y alianzas comunitarias.